Knocking on Hell’s Door

Las puertas del infierno están a punto de abrirse. Tras un año extremadamente apocalíptico que condicionó el nivel de la pasada edición, vuelve Sitges con una auténtica carga de caballería fantástica. Se nos dice que llega bajo el signo de la bestia y celebra las correrías de los licántropos, con un repaso a la filmografía de este personaje clásico.

Tenemos en estos momentos una cartelera comercial rica en género que parecía predecir una nueva escasez en nuestro querido paraíso del terror y la ciencia ficción. Sin embargo…

Sitges arrancará el día 7 de octubre con una película de dirección femenina, el retorno de Ana Lily Amirpour quien, después de Una chica vuelve sola a casa de noche (A Girl Walks Home Alone at Night) y Amor carnal (The Bad Batch), presenta Mona Lisa and the Blood Moon (2021). En una edición llena de dirección femenina, la organización añadió a última hora otra sorpresa con la ganadora de Cannes, Julie Ducorneau y su Titane, para ver si esta nueva obra marea a la platea como hiciera su anterior Crudo (Raw), disfrutada en el festival hace un par de años por los paladares más peculiares.

Mona Lisa and the Blood Moon (Amy Lily Amirpour)

Tendremos también, para disfrutar y/o opinar sobre ellas, las obras de Mandico (de cuyo After Blue nadie discute la insólita estética), el último Yimou (Cliff Walkers) o la animación Mad Dog de Phil Tibbet (creador stop motion, entre otros, de los dinosaurios de Jurassic Park).

Pero no podían faltar los sospechosos habituales formando un cartel muy potente. Llama mucho la atención lo (pen)último de Sion Sono en insólita colaboración con el inefable Nicolas Cage, siendo éste un género en sí mismo. Veremos que da de sí este thriller fantástico, Prisoners of the Ghostland (por cuyas entradas habrá que luchar). Pero los focos están puestos en Edgar Wright y un cuento oscuro, Last Night in Soho (que hace doblete con un documental sobre los Spark Brothers, autores de la banda sonora de Anette), David Gordon Green, quien sigue el reboot con una nueva secuela del amigo Myers, Hallowen Kills, de la que se dice es mucho más oscura y brutal que las versiones anteriores, Nitram de Justin Kurzel (que llega con el premio de Cannes al mejor actor), In the Earth de Ben Wheatley (que regresa al género que cultivó con Kill List o High Rise tras su neutro remake de Rebecca), The Trip de Tommy Wirkola (Dead Snow, Siete hermanas), el siempre fascinante (Vals con Bashir, The Congress) Ari Foldman con Where is Anna Frank?, Earwig de la peculiar Ludmilla Hadzihalilovic (Evolution) o el premio honorífico de este año (junto a Carlos Saura y Belén Rueda) Mamoru Hosoda (Summer Wars, Wolf Children, Mirai) y su Belle.

Belle (Mamoru Hosoda)

Sólo por los anteriores Sitges merece la pena pero no se vayan, que aún hay más.

Precedidas por su fama llega de Hong Kong Limbo, un policiaco con psychokiller incluido, como Execution que desde Rusia narra los esfuerzos policiales por demostrar la culpabilidad de otro serial killer. Si seguimos repasando la geografía mundial veremos, desde Tailandia, The Medium, una historia de posesiones malignas. Desde Islandia, Lamb (ganadora a la cinta más original en A certain regard del festival de Cannes) cuenta la historia de una pareja que halla un niño en el ámbito rural de la isla. Niños extraños también, desde Noruega, en The Innocents, que descubren sus superpoderes y los usan según su mentalidad. De Austria veremos Luzifer (premio de la crítica en el Festival de Locarno),  dónde un joven con mentalidad de niño debe enfrentarse a decisiones serias, da mal rollo a partir del nombre del productor, Ulrich Seidl, difusor de las perversiones de su país. La italiana Freaks Out enfrenta a unos personajes deformes con los nazis durante la segunda guerra y viene muy bien avalada desde el Festival de Venecia. Desde Gran Bretaña llegan Keira Knightley, Matthew Goode y Annabelle Wallis en Silent Night, despidiéndose del mundo con una fiesta familiar, Censor (con diversos premios internacionales) en la que una censora mezcla ficción y realidad tras un visionado, y también Here Before, sobre una mujer (Andrea Riseborough a quien ya vimos en obras inquietantes como Mandy, Nancy o Possessor Uncut) que cree reconocer a su hija desaparecida en la hija de unos vecinos.

Y el panorama nacional queda representado con solvencia. Más allá de los episodios actualizados de la serie de Chicho Ibáñez Serrador, Historias para no dormir, tendremos a Y todos arderán (David Hebrero), La abuela (del ya habitual Paco Plaza), Tres (de Juanjo Giménez, ganador hace unos años en Cannes con el corto Timecode) y Jacinto (Javi Camino).

La abuela (Paco Plaza)

En cuanto a la sección Anima’t, siempre disfrutable, apostaría por tres obras. La brasileña Bob Cuspe: nos nao gustamos de gente (con un personaje punk que huye de la mente de un autor en crisis a punto de lanzarse al producto más comercial), Junkhead (una artesanal obra stop motion elaborada durante diez años) o Welcome to Sigheilkirchen (en la que un joven desafía a una comunidad filonazi).

Entre las sesiones de Sitges Clàssics, en un año dedicado a la licantropía, se puede optar por obras de Olea, Paul Naschy, Dante o Landis pero hay la opción de ver Wolf Guy, con un detective licántropo interpretado por el recientemente desaparecido Sonny Chiba. A parte de los mordiscos, se pueden recuperar A Praga de Mojica Marins, La bête de Borowczyk u On the silver globe, un sci-fi de Zulawski con científicos creando una nueva civilización en otro planeta.  

Finalmente, en Noves Visions, podemos encontrar propuestas estimulantes como Strawberry Mansión (de los directores de Sylvio), con un recaudador atrapado en sueños ajenos y absurdos, Beyond the Infinite Two Minutes (con una televisión que muestra el futuro con dos minutos de adelanto), A nuvem rosa (con dos desconocidos compartiendo piso debido a una pandemia), Medusa (con un grupo de mujeres perfectas que se echan a la calle para apalear a las descarriadas)  o Sound of Violence (dónde una música traumatizada experimenta con los sonidos en busca de una obra maestra) en las que tendrás que arriesgar para descubrir tesoros cinéfilos.

Wolf Guy (Kazuhiko Yamaguchi)

Por supuesto eso no es todo. Tenemos las obras de la sección golfa Midnight X-Treme, y de la inabarcable Brigadoon, con sus dosis de terror gore y festivo. Tampoco están referenciados (ya oigo las quejas de mis compañeros) otros clásicos de Sitges como Miike, De la Iglesia, Du Welz o la pareja Maury/Bustillo pero alguna opción hay que tomar para no transcribir el programa entero. Ya sabéis, busca, escoge y… seguro que lo disfrutas. Nos vemos en Sitges.