De nens, de Joaquim Jordá

De nensEs difícil hablar de un santo, más cuando el santo es laico y significa tanto para un grupo de la población que, generalmente, no celebra el santoral. Joaquim Jordá es hoy una leyenda del cine transgresor. Durante cuarenta años, Jordá desarrolló su carrera guiándose por su conciencia y así puede verse en la evolución de sus películas. Fue capaz de desarrollar una de las carreras más interesante y completas del cine español, que combinada con con su labor docente, lo convierten en uno de los mayores tótems de la ficción y la no-ficción del Estado.

A él le corresponden grandes títulos del cine que sucede más allá de las grandes carteleras aunque no le faltaron éxitos durante su carrera. Su carrera va desde el cine militante con Numax presenta (1979) a la ficción de terror pop con Un cos al Bosc (1996). Pero sobre todo, se le conoce por sus documentales, que no llegaron pronto, él mismo reconoce como su primer documental Monos como Becky (1999) cuando su carrera ya estaba más constituida. El mismo Jordá confesó que sus incursiones en el documental eran una reacción a la imposibilidad de realizar esas películas como ficciones. En marzo de 2004, Jordá estrena De nens, una de sus grandes películas, y personalmente la que más admiro. De nens se convierte casi de inmediato en el catalizador de toda una época y de una ciudad, la Barcelona del final del siglo XX, su estreno atrajo una polémica que permanece activa. El documental vino a reflejar una de lucha política que pese a estar más que presente en la vida de un gran número de personas ocupaba poco espacio de debate en la opinión general.

Es complicado desenmarañar De nens, un documental de tres horas que mezcla sesiones de juicio rodadas con representaciones de teatro experimental, testimonios de vecinos, los del propio director y de expertos para contar una de las mayores manipulaciones mediáticas de la historia reciente del país. De nens, es un terreno pantanoso en el que uno ha de enfrentarse consigo mismo para emitir un juicio que difícilmente será satisfactorio. Desde la tradición documentalista más comprometida, la película se pone a prueba a sí misma en cada transición y de esa forma pone también a prueba a quien lo ve. Jordá plantea el documental desde una perspectiva puramente anti-periodística, no solo como una táctica de creación cinematográfica, en la que huye de los tópicos y de modelos de representación prefabricados sino como una posición política. Utiliza el documental como forma de transgredir los límites de los relatos y poner en valor la subjetividad como forma de constricción de la realidad. Reivindicando, frente al cine tradicional y la asunción de la verdad en el registro, espacio para la mentira, el malentendido o la fragmentación.

De nens

El documental se rueda en un momento clave para la ciudad de Barcelona. Aquella Barcelona olímpica empezaba a despertarse de una corta fantasía a la luz de los destellos del mediterráneo. Como en tantas ocasiones a lo largo de la historia, la preparación de la ciudad para los juegos olímpicos sirvió como excusa para ejecutar los planes urbanos más drásticos que el ayuntamiento planeaba. Uno de los objetivos clave de aquella transformación fue el barrio del Raval. Desde hace mucho tiempo, los planes urbanísticos de las administraciones públicas habían tenido al Barrio chino como objetivo. A finales del s. XX, el higienismo decimonónico era ya una excusa demasiado evidente y los términos comenzaron a variar y a estar más relacionados con una Barcelona más abierta al turismo, a la Europa moderna y a ese capitalismo de rostro humano que iba asfixiando las clases menos favorecidas por toda Europa.

Esta alteración social sirve como impulso para muchos artistas barceloneses. Especialmente en el cine, este fenómeno urbanístico deja dos clásicos del documental contemporáneo. Por un lado, José Luis Guerín, en 2001 estrena el documental En construcción. Una muy recomendable película que recoge las sensibilidades de los habitantes de un barrio que desparece delante de ellos para mutar en un intento de producto de mercado. En la película vemos cómo la reconversión urbanística va dejando al aire una memoria enterrada por los estratos propios de la evolución, no solo de la ciudad sino la de sus habitantes. Un contraste que subraya las emociones y los efectos de la arquitectura sobre la conciencia de quienes allí habitan, una película que refleja cómo los siglos se agolpan sin tener en cuenta quienes viven allí. En el primer minuto de película, una sentencia impresa en la pantalla lo deja claro: “El chino, un barrio que nace y muere con el siglo”. Afirmación que Jordá también defiende en su película.

Casi al mismo tiempo se rueda De nens, gran muestra de cómo dos documéntales rodados en el mismo lugar y con el mismo espíritu crítico puede dar como resultado dos artefactos que disparan en direcciones diferentes.

De nens, nos enseña estos cambios urbanísticos, a través de la confrontación de los movimientos vecinales. No fue sencilla la coordinación de un solo espíritu vecinal a la hora de confrontar los nuevos planes y así fue como se produjo un cisma entre la Asociación de Veïns del Raval, más abierta a los cambios urbanos y confiada de los beneficios de estos y la Taula del Raval, radicalmente en contra. La confrontación acaba con el estallido del conocido como Caso Raval, un supuesto caso de pederastia que hizo retumbar los cimientos de esta última organización.

De nens

El principal acusado de la trama de pederastia fue el educador y miembro de la Taula, Xavier Tamarit, junto con un grupo de padres, pertenecientes a clases marginales, acusados de prostituir a sus hijos. El documental se ocupa de reflexionar sobre la manipulación del caso y de señalar las deficiencias del sistema judicial y su relación cómplice con los medios de comunicación y las administraciones públicas. De hecho, el caso Raval se resolvió con la absolución de todos los padres imputados y con una condena para Xavier Tamarit mucho más baja de lo que presumían los titulares.

A través de este caso el objeto de estudio se va engrandeciendo. Para Jordá la construcción del relato oficial que se genera alrededor del Caso Raval es la última capa de la manipulación y la destrucción del Chino como elemento de oposición al ayuntamiento y sus reformas. Jordá señala a la criminalización total de las clases más bajas como objetivo consensuado de medios, juzgados y ayuntamiento.  Y es así como se plantea también la construcción de la película, que se apoya en el juicio para ejemplificar ese proceso traumático de oficialización de la subjetividad y la marginalidad.

La película, aparte de los juicios, planteados como verdades mediadas y al servicio de una versión oficial, enseña también una serie de representaciones de teatro y canciones compuestas por Albert Pla, el encargado de la banda sonora de la película. A través de estas representaciones Jordá trata de mostrar hechos mediados únicamente por el cuerpo, lejos de la operaciones culturales que supone la práctica periodística.

De esta forma, a través de contradicciones y multiplicidades se construye De nens. Un documental que es casi un ejemplo en sí mismo del su potencial político del cine. A pesar de ese constante no-comprender completamente, la película gana valor por tener un sentido perfectamente construido. La brillantez de la propuesta consiste en parte en la incomodidad del espectador al verla. Jordá no nos brinda un relato cómodo, de hecho todo lo contrario. Como él mismo dirá en una entrevista “la pederastia se ve como el mayor de los crímenes en la sociedad actual” y aún así, la película nos enfrenta al juicio desde el punto de vista del acusado visto como chivo expiatorio.

Hace veinte años, en Barcelona se estrenaba un documental que, en mi opinión, es el mayor monumento que se haya hecho jamás a todo lo que supuso el cambio urbano en Barcelona y las estrategias que se usaron para ejecutarlo. Invito a ver y reflexionar De nens para ponerse a prueba y plantearnos hasta dónde estamos dispuestos a cuestionar nuestra propia conciencia en favor de la verdad. Así que si uno tiene tres horas libres y está dispuesto a asomarse a lo más profundo de las raíces de los poderes fácticos, no dejéis de ver De nens.

El antropólogo Manuel Delgado, dice en su entrevista en el documental algo que creo que resumen bastante bien el espíritu del documental: “Frente a la ciudad planificada, existe esa otra cosa que se resiste a las intervenciones del ayuntamiento, la ciudad. Por encima de todo, la ciudad”.