Amores que matan
La pareja protagonista de Honey Bunch, Homer y Diane, compiten en el nivel insufrible de cursilería con Tim y Millie, los amantes de Together. Se pasan el rato retándose a tolerar las situaciones más insoportables que pueden darse en la vejez o la enfermedad, tratando enfermizamente de saber hasta qué punto el otro está dispuesto a seguir a su lado, incluso en las peores condiciones. El azar, no obstante, les pone a prueba en este sentido, aunque no sabremos la causa o el proceso hasta avanzada la cinta.
Los autores de la también retadora Violación se orientan ahora hacia un auténtico thriller que, como comentaron en la presentación del film, es un canto de amor al género y un canto de amor al amor. Un amor algo enfermizo, diríamos, a raíz de la situación con la que arranca la película, con el ingreso de Diane en una clínica de métodos tan peculiares como sospechosos. Con evidentes referencias a Rebeca, Dusty Mancinelli y Madeleine Sims-Fewer, arrancan su historia con el objetivo de recuperar la memoria de Diane, tras un accidente del que no sabemos nada. A partir de tal premisa, se desplegará una puesta en escena dónde Diane parece la víctima propiciatoria de la clásica luz de gas, situada en un entorno misterioso (una mansión casi victoriana) y un día a día repleto de (aparentes) alucinaciones. De modo progresivo, la mejora de Diane se acompaña de un malestar creciente debido a su consciencia de que algo en el entorno no está desarrollándose con normalidad.
Mancinelli y Sims-Fewer desarrollan la historia con habilidad, jugando no solo con Diane sino también con el espectador, quien puede optar por interpretar las imágenes que ve Diane como visiones o como enigmas que resolver. El giro final (con sorpresa incluida en el ático del edificio, al igual que sucede en The Home de James De Monaco), da una sorprendente explicación de lo sucedido y discierne no sólo la trama sino la capacidad de amor de Homer… un amor más enfermizo que compasivo. Pero, vaya, dejemos que los espectadores se sorprendan y la disfruten.


