Mientras que muchos medios, casi todos, comienzan a sacar sus listas de lo mejor del año, nosotros, como viene siendo costumbre, vamos a ser comedidos y le vamos a dar una oportunidad a los estrenos de diciembre. ¿Quién sabe cuántas obras maestras nos aguardan este mes a la vuelta de la esquina? Quien dice obras maestras dice películas majas, o al menos aceptables. En realidad ya me conformo con que no me den ganas de incendiar la sala.
Vamos a comenzar con tres títulos que se estrenan el día de Navidad, una fecha tan buena como cualquier otra para pasarla en el interior de una cómoda sala de cine con el aire acondicionado a tope como si estuviésemos en agosto: Nosferatu, de Robert Eggers, otro remake innecesario con el que esperemos no se nos atraganten las viandas previas; Parthenope, de Paolo Sorrentino, una epopeya napolitana y femenina recibida con tibieza por la crítica en Cannes y Donosti, y ¡Oh, Canada! de Paul Schrader, que si nos entrega por enésima vez la misma película ya me daré por satisfecho.
Y ahora otros títulos destacados que se estrenan en diciembre, pero en fechas menos señaladas. Tengo curiosidad por saber si Robert Zemeckis será capaz de hacer que sea interesante lo que pasa entre las mismas cuatro paredes (incluso cuando no están) durante un porrón de años con la cámara puesta todo el tiempo en el mismo sitio. Al menos el tráiler (que además por momentos me recordó a El árbol de la vida) con el I’ve Seen All Good People de Yes me ha dado algo de fe; Está también Emilia Pérez, donde Jacques Audiard demuestra que hasta un culebrón mexicano puede molar con el suficiente pulso narrativo; Corazones rotos, un drama romántico de tres horas escrito a ocho manos (entre ellas las de Audrey Diwan y el propio director, Gilles Lellouche), cuya sinopsis me recuerda vagamente a la de ¡Quiéreme si te atreves! y protagonizado por Adele Exarchopoulos, que podrá ser muchas cosas pero espero que no sea convencional; Lo último de François Ozon, Cuando cae el otoño, ganadora del premio a mejor guion en el pasado festival de San Sebastián; Se estrena el documental Dahomey, de Mati Diop, ganador del Oso de Oro de Berlín, que afronta el tema del colonialismo a partir del regreso de ciertos tesoros usurpados en su día y que ahora regresan desde Francia a su hogar original en Benín; También premiada, ganando en el Festival de Rotterdam, nos llega La parra, de Alberto Gracia, con música de Jonay Armas y fotografía de Ion de Sosa; La guitarra flamenca de Yerai Cortés, el documental de Antón Álvarez (mas conocido por su nombre artístico C. Tangana) del que por lo menos aplaudo su tráiler, que incluyendo imágenes de la película no es de aquellos que la revientan entera y además consigue invitar a su visionado; Y por último, mi apuesta personal va para María Tremor y su debut en el largometraje con Rock Bottom, película de animación que, como su título apunta, encuentra su inspiración en la música de Robert Wyatt, cuyos temas también se incorporan a la banda sonora y que solo por eso ya tiene una pinta fenomenal.
El cine español tiene, como viene siendo habitual, una buena y variada ristra de películas que llevarnos a los ojos: En Al otro barrio Quim Gutiérrez es un empresario que tiene problemas con hacienda y el fisco le hace pagar con dinero y en experiencia vital; Me llama la atención que el guion de ¿Quién es quién?, la nueva película de Martín Cuervo, venga firmado por una sola persona, porque su argumento parece calcado de Familia revuelta (todos los miembros de la familia se intercambian los cuerpos), que a su vez, por supuesto, estaba basada en un libro de 2010 que supongo estaría ligeramente inspirado por Freaky Friday (2003) donde eran únicamente madre e hija las que se intercambiaban, que a su vez era un remake de Freaky Friday (1976)…; Gonzalo Perdomo debuta con La fianza, thriller protagonizado por Juana Acosta; David Baute dirige la cinta de animación Mariposas negras, que une tres historias femeninas a través del cambio climático; Después de varios documentales y el especial de Netflix con numerosos humoristas contemporáneos reinterpretándole no es de extrañar que llegue ahora a nuestras pantallas un biopic sobre Gila; Marisa Crespo y Moisés Romera dirigen una cinta de terror, o al menos de suspense, con un argumento bastante atractivo, y un título que casi cualquiera le podria decir a otra persona, salvo tal vez las protagonistas de La sustancia la una a la otra: Tú no eres yo; L’edat inminent es un drama que se adentra en un tema delicado como es el de los cuidados de nuestros mayores; Susan Béjar dirige Un lío de millones, perteneciente al género remake de comedia francesa de éxito y cuenta con la presencia de Antonio Resines y Gracia Olayo, que también sale en la ya mentada ¿Quién es quién?; Sin instrucciones, sin embargo, se enmarca en un género diametralmente opuesto al anterior, siendo un remake de comedia mexicana de éxito. En esta en concreto Paco León interpreta a un bon vivant al que le cae una hija recién nacida de rebote y ocho años después la madre quiere recuperarla.
Aunque el cine de animación no es necesariamente infantil, las navidades suelen tener a los niños desocupados, así que la mayoría de estos estrenos están definidos para ese público objetivo, aunque no todos. Por ejemplo, 46 años después de la mítica película de Ralph Bashki, una nueva cinta animada que encuentra su inspiración en la Tierra Media creada por J.R.R. Tolkien: La guerra de los Rohirrim, dirigida por Kenji Kamiyama (Blood: The Last Vampire o las series animadas de Ghost in the Shell). Tampoco está especialmente orientada al público infantil la también japonesa Solo Leveling: Reawakening, de corte fantástico; Se reestrena una cinta de 2003, Interstella 5555: The 5tory of the 5ecret 5tar 5ystem, también japonesa y también para adultos, que en 68 minutos cuenta una historia que me recuerda a una de las subtramas de Trolls 3; Niko: más allá de la aurora boreal es una cinta de animación, esta sí, para toda la familia, que en el fondo sabemos que lo que quiere decir es que podemos llevar a nuestros pequeños sin necesidad de que salgan traumatizados como si les llevamos a ver esa simpática cinta de payasos dirigida por Damien Leone, por poner un ejemplo; La precuela de El rey león con CGI. Si visteis El rey León de Jon Favreau ya sabéis a qué me refiero, y si no, supongo que sois afortunados. Esta vez dirige Barry Jenkins, director de Moonlight, aquella peli ganadora de un Óscar de la que nadie se acuerda; Superklaus, un Santa Claus que se despierta creyéndose un superhéroe después de darse una buena leche (como si no fuese suficiente superheroismo su tarea habitual); y hablando de leche, la tercera aventura animada de la vaca Klara, con sus setenta minutos puede ser una muy buena opción para amansar a las criaturas más jóvenes de la familia el día de Navidad, aún a riesgo de que no cojamos el hilo si no hemos visto las dos primeras; y otra tercera parte, la de Sonic…
En diciembre también se estrenan siete documentales: Uno sobre Jeff Koons, el artista y su obra, pero como sugiere el título (Un retrato privado), también sobre la persona; Hace unos meses se estrenaba un documental sobre una banda de K-pop, parece que la cosa tiene su tirón porque este mes llega RM: Right People, Wrong Place (a no ser que sea la misma que se haya retrasado, todo podría ser); Y hablando de retrasos, puede que este mes por fin se estrene el documental de Wim Wenders sobre el pintor Anselm Kiefer; Carmen Chaplin, nieta del insigne director de Tiempos modernos dirige el documental Chaplin: espíritu gitano cuyo titulo en castellano no dudo de que quiera apuntar en la dirección de lo que el documental después nos cuente, pero no es exactamente el titulo original; Niños de las brisas, desde Colombia, que sigue durante varios años a un grupo de niños que tocan música clásica; También Camboya, 1978, de Rithy Pahn, que no se estrenó en noviembre y lo hará este mes, y por último Sumario 3/94, un documental que reabre un caso treinta años después de que el acusado cumpla condena (tal vez injustamente) y haya salido liberado. Además, dos conciertos. Y en salas (lo que no sé es en cuantas). Uno de la islandesa Laufey y otro de los coreanos NCT DREAM. Sí, sí, más K-pop…
Poca tela queda que cortar, vamos con ella, a ver si salen unos retales majos: La flor del burití, un coming of age indígena en la selva brasileña; J. C. Chandor (Margin Call, El año más violento…) dirige Kraven the Hunter. ¿Sería este el motivo por el que han reestrenado todas las películas de Spiderman los meses anteriores? Es algo que sigue inquietándome; La maldición del Queen Mary, terror en alta mar, por si no habíamos tenido bastante con la del Demeter; Las hijas del califato, el debut de Mareike Engelhardt, un drama sobre una joven francesa que se ve atrapada en un país en guerra; El maestro del crimen, una buddy-movie en su vertiente maestro-discípulo con Christoph Waltz haciendo de veterano sicario a punto de jubilarse; Cónclave es un thriller religioso en torno a la elección de un nuevo Papa que tiene pinta de hablar de conspiraciones ocultas contra la humanidad y que podría haber escrito perfectamente Dan Brown o similar (prejuicios mode off). Siempre he pensado que a Ralph Fiennes le pega ser cura, en cualquier caso.
En cuanto a plataformas, una breve selección interesada (y probablemente poco interesante): Empezamos por Netflix: Si el mes pasado le tocó a Juan Rulfo y su Pedro Páramo ¿alguien la ha visto?, en esta ocasión son los Cien años de soledad de García Márquez, eso sí, en un cómodo formato serie de dieciséis capítulos (a ver quien era el listo que lo metía en noventa minutos). Otra serie que, sinceramente, me apetece algo más, es 1992, de Alex de la Iglesia, un thriller de asesino en serie durante la Expo de Sevilla. Y en cuanto películas, mi apuesta es para lo nuevo de Jaume Collet-Serra: el thriller navideño Equipaje de mano; En Disney+ una serie de Star Wars protagonizada por niños (no diré nada sobre su público objetivo para no herir sensibilidades), de la mano de Jon Watts y los Daniels. También una serie spin-off de Inside Out. En Max tenemos una serie de animación de James Gunn, Creature Commandos, basada en un cómic de DC. Si es la mitad de divertida que su Peacemaker, compro. En Prime Video, Secret Level, serie de antología de Tim Miller (Love, Death + Robots) con cada capítulo inspirado en un videojuego. En Movistar+ podremos ver la tercera entrega de la nueva saga de Diabolik de los hermanos Manetti: Diabolik, ¿Quién eres?