Carla Simón

Verano 1993, de Carla Simón

Un, dos, tres, estàs morta Y la muerte, que yo siempre había considerado la magnitud más importante de la vida, oscura, atrayente, no era más que una tubería que revienta, una rama que se rompe con el viento, una chaqueta que cae de la percha al suelo Karl Ove...